viernes, 13 de marzo de 2009

NO LLORES AHORA

No llores ahora, que me enredas el alma. Mañana, ella vendrá. Reza porque no te encuentre así: lloriqueando como marica y haciéndome llorar también a mí. Tú me lo has contado, a mí, que no sé nada. Tú buscabas consejos y yo sólo te presté mis oídos, para que te oyeran, y luego mi cuerpo, para recibir tu abrazo de angustia. Por favor no me agradezcas.

Ahora no; no llores ahora ni me abraces. Me declaro incapaz de darte un consuelo decente: Al primer contacto me uniré a tu llanto, que es lo único que siento, pues si he conocido realmente el amor y el dolor en la vida, ha sido por tus relatos sangrantes. Es demasiado el favor que me haces al contarme tu historia, no cuentes conmigo, no soy nadie. Alma en pena, no vengas a mí.

Vete a dormir, no llores esta noche; ya vendrán otras lunas para recibirlas sufriendo o volver a reír. Mañana ella vendrá con nosotros, no vendrá sola y lo sabes; yo sé que no te gustará tener los ojos de vidrio cuando llegue el momento, la oportunidad de cambiar tu retorcido destino. Olvida ese dolor que te encierra y libérate. No puedo ir más allá de las palabras. Tan sólo limpia tus ojos: será sólo un día. Luego, te juro que estaré a tu lado y podremos llorar los dos juntos, todo el tiempo que quieras, como amigos.

No hay comentarios: